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María Olimpia de Grecia (en griego: Μαρία Ολυμπία comúnmente conocida como Olimpia de Grecia) (Nueva York, Estados Unidos, 25 de julio de 1996) es la primogénita y única hija de los príncipes herederos de Grecia, Pablo y Marie-Chantal de Grecia, y por ello le corresponde el tratamiento de Alteza Real.
Olimpia (en griego clásico: Ὀλυμπία; en griego moderno: Ολυμπία [Olympía]; en latín: Olympia) es un sitio arqueológico situado en la unidad periférica de Élide, en Grecia. En la Antigüedad, era la sede de un importante santuario y además el lugar donde se celebraban los Juegos Olímpicos.
2 de jul. de 2012 · La antigua Olimpia era un santuario griego dedicado al culto de Zeus situado en el Peloponeso occidental. Allí, desde el año 776 a.C. hasta el 393 d.C., se celebraron cada cuatro años los Juegos Olímpicos Panhelénicos en honor a Zeus. Olimpia está declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad.
25 de ene. de 2024 · Olimpia, los Juegos Olímpicos de la Grecia antigua. Los atletas olímpicos de la antigüedad participaban en los juegos movidos por el afán de gloria, pero sobre todo por las suculentas recompensas que obtendrían si ganaban. Grecia Antigua Civilizaciones. Fernando García Romero, catedrático de filología griega de la Universidad Complutense de Madrid
4 de abr. de 2024 · El Monte Olimpo, el legendario hogar de los dioses griegos, se encuentra fuera de la ciudad e inspiró el nombre del lugar. Olimpia es mejor conocida como la ubicación de los antiguos Juegos Olímpicos, una celebración atlética y religiosa celebrada en homenaje al dios griego Zeus.
Al oeste del Peloponeso se encuentra el santuario más famoso de la antigua Grecia: Olimpia, que se convirtió en el siglo X a. C. en un centro de culto a Zeus. Aquí podrás ver los restos de las estructuras que hubieron para celebrar los Juegos Olímpicos, que tenían lugar cada cuatro años a partir del año 776 a. C.
Los Juegos Olímpicos son un testimonio del legado histórico de la Antigua Grecia y su importancia como precursora de los eventos deportivos modernos. Estos juegos no solo eran una competencia atlética, sino que también tenían un profundo significado cultural y religioso.
