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  1. El billete Edimburgo Real te proporciona 48 horas de viajes ilimitados en los autobuses City Sightseeing, Edinburgh Tour y Regal Tour.Además, este paquete incluye entradas garantizadas a tres lugares de visita obligada: el Palacio de Holyroodhouse, el Yate Real Britannia y el Castillo de Edimburgo.

  2. No fue hasta el siglo X cuando los escoceses recuperaron esta zona de Escocia. A finales del siglo XII, Malcolm III construyó el castillo en Castle Rock y comenzó a florecer una pequeña aldea a su alrededor. En el siglo XII ya se tiene conocimiento de Edimburgo como un burgo real, con capacidad de comerciar, un privilegio para la época.

  3. Royal Mile 3. Scotch Whisky Experience. Nuestra propuesta es que la primera parada de la Royal Mile, bajando del Castillo, sea en la Scotch Whisky Experience, un lugar perfecto para conocer las diferentes etapas de la elaboración del famoso whisky de malta escocés y que es otro de los lugares más interesantes que ver en Edimburgo.

  4. Ruta por la New Town de Edimburgo (1 día). Qué hacer en la New Town. Pasear por los Princes St Gardens, subir al monumento a Scott y a Calton Hill para disfrutar de las vistas de Edimburgo, ir de tiendas por Princes St, visitar la National Scottish Portrait Gallery (gratis), tomar algo en uno de los pubs de Rose St…

  5. El castillo de Edimburgo alberga la Piedra del Destino, los Honores de Escocia, varios museos y además es uno de los enclaves de la capital escocesa con unas de las vistas más espectaculares. No es de extrañar que sea la atracción turística más visitada de toda Escocia.

  6. Un símbolo de la grandeza escocesa. Desde su fundación en el siglo XII, el Castillo de Edimburgo ha sido escenario de innumerables batallas, intrigas políticas y momentos cruciales para el destino de Escocia.

  7. Al final de la Royal Mile se alzan dos edificios emblemáticos: el Parlamento escocés, diseñado por el arquitecto catlán Enric Miralles, una construcción controvertida que quiere fundirse con la naturaleza escocesa, y el palacio de Holyroodhouse, que data de 1128 y a lo largo de los siglos ha servido como residencia a los reyes y reinas de Escocia.