Yahoo Search Búsqueda en la Web

Resultado de búsqueda

  1. Análisis. Federico García Lorca muestra este poema la muerte por amor, no como algo metafórico, sino como algo real. Quizá no por amor a alguien, sino por amor a la propia vida. A través de las tres partes del poema, va a ir describiendo la muerte, a manos de hombres armados, de jóvenes de pueblo, que no tiene que ser el suyo, que puede ...

  2. Federico García Lorca. Inicio > Federico García Lorca > Muerto de amor. +. - Escuchar este Poema. ¿Qué es aquello que reluce. por los altos corredores? Cierra la puerta, hijo mío, acaban de dar las once. En mis ojos, sin querer, relumbran cuatro faroles. Será que la gente aquélla. estará fregando el cobre. * Ajo de agónica plata.

  3. Muerto de amor. [Poema - Texto completo.] Federico García Lorca. ¿Qué es aquello que reluce. por los altos corredores? —Cierra la puerta, hijo mío; acaban de dar las once. —En mis ojos sin querer, relumbran cuatro faroles.

  4. Muerto de amor. de Federico García Lorca ¿Qué es aquello que reluce por los altos corredores? Cierra la puerta, hijo mío, acaban de dar las once. En mis ojos, sin querer, relumbran cuatro faroles. Será que la gente aquélla estará fregando el cobre. * Ajo de agónica plata la luna menguante, pone cabelleras amarillas a las amarillas torres.

  5. ¿Qué es aquello que reluce. por los altos corredores? Cierra la puerta, hijo mío, acaban de dar las once. En mis ojos, sin querer, relumbran cuatro faroles. Será que la gente aquélla. estará fregando el cobre. * Ajo de agónica plata. la luna menguante, pone. cabelleras amarillas. a las amarillas torres. La noche llama temblando.

  6. Poema escrito por. Muerto de amor, por Federico García Lorca: ¿Qué es aquello que reluce por los altos corredores? Cierra la puerta, hijo mío, ..

  7. Muerto de amor, by Federico García Lorca | poems, essays, and short stories in Poeticous. Federico García Lorca. Muerto de amor. A Margarita Manso. ¿Qué es aquello que reluce. por los altos corredores? Cierra la puerta, hijo mío, acaban de dar las once. En mis ojos, sin querer, relumbran cuatro faroles. Será que la gente aquélla.