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  1. Las Mejores 30 Frases De Adolf Loos. El ornamento es un crimen. Adolf Loos. 1/30. El ornamento es un crimen. Explicación. La famosa cita del arquitecto Adolf Loos, "El ornamento es un crimen", resume su postura radical contra los elementos decorativos en la arquitectura.

  2. Hace 5 días · Una de las frases más célebres del genio en este sentido es: “De las diferentes asas ornamentadas de nuestras vasijas hemos obtenido, en el transcurso de los últimos decenios, callos renacentistas, barrocos y rococós”. La evolución de la cultura era, según él, proporcional a la desaparición del ornamento en los objetos utilitarios.

  3. Frases de Adolf Loos. Adolf Loos fue un arquitecto austriaco. Cursó estudios en la Escuela Profesional de Reichenberg y en la Politécnica de Dresde. En la ciudad de Chicago trabajó como albañil, entarimador y delineante. Posteriormente realizó obras en diversos países de Europa, tales como Austria, Francia y en Viena comienza a ejercer ...

  4. Frases más importantes. Recopilación de las mejores frases de Adolf Loos. No tengas miedo de no estar a la moda. Adolf Loos tener. Dí la verdad, la naturaleza solo se alía con la verdad. Adolf Loos aliar decir naturaleza. La obra de arte muestra a la gente nuevos rumbos y piensa en el futuro. La casa piensa en el presente.

  5. 22 de jul. de 2022 · La obra de arte no es responsable ante nadie; La casa es responsable ante todos. La obra de arte quiere sacar a la gente de su estado de comodidad. ¿Cuáles son las famosas frases, citas de Adolf Loos? Las mejores frases, citas de Adolf Loos sobre la vida, el amor, la motivación, la ciencia.

  6. La capacidad de un hombre de exaltar a una sociedad con unas pequeñas líneas, de defender la moralidad y la sensatez, de hablar de la revolución social de la Arquitectura. En el año 1908 se publica “Ornamento y Delito” escrito por el genio austríaco Adolf Loos.

  7. 13 de ene. de 2019 · (Tal vez ninguna sociedad lo hará.) Hoy en día, borrar la historia, negar nuestras identidades colectivas y rechazar los placeres más profundos de reconocer el pasado, son los crímenes reales. Hoy, podemos agradecer a Adolf Loos por recordárnoslo.