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  1. Satiricón y sobre su autor. El mismo nombre del autor presenta variaciones en los pocos y escuetos testimonios que de él subsisten en citas de fragmentos perdidos de la obra. Los gramáticos de los primeros siglos son los que más lo citan. Honorato Servio, Mario Mercátor, Pompeyo, Juan Lido, Boecio, Prisciano, Lactancio Plácido, Mario

  2. 2. El autor A la vez que se constituía la colección de fragmentos de El Satiricón se iba identificando a «su» autor, Petronio, con cierto personaje consular llamado igualmente Petronio y del cual Tácito nos da las siguientes noticias en el libro XVI (capítulos XVII-XIX) de sus Anales: «En el transcurso de breves días

  3. Gobernador de la provincia de Bitinia, hedonista y autor del célebre «Satiricón», considerada la primera novela latina de la historia, Tito Petronio Niger se contaba entre los íntimos de Nerón, quien llegó a nombrarlo «árbitro de la elegancia» por su buen gusto y sofisticación. Pero, al final, su proximidad al emperador acabaría por ...

  4. Según el antiquísimo historiador Tácito, Petronio, autor del Satiricón, dormía de día y vivía de noche, que era cuando tenía sus negocios y sus deleites, era un vividor, pero de arte epicúreo, primero protegido de Nerón, se ganó las envidias de otros y fue denunciado por conspiración, uno de sus esclavos fue sobornado y le acusó de ir en contra de Calpurnio Pisón.

  5. Supuesto autor del Satiricón, se le suele identificar con un aristócrata citado por Tácito que vivió en Roma en el siglo 1 de la era cristiana y que fue gobernador y procónsul en Bitinia. Famoso por su elegancia, se ganó el sobrenombre de Árbitro porque ejerció de “árbitro de la elegancia” en la corte de Nerón, que lo había nombrado su consejero en “cuestiones de buen gusto”.

  6. 10 de oct. de 2023 · El incierto destino de El Satiricón y su autor podría verse expresado en el parlamento del consternado Encolpio, cuando se encuentra ante el cuerpo de Licas: Mortales insensatos, no os fiéis del porvenir con el corazón henchido de proyectos ambiciosos, ni os dispongáis a gozar durante millares de años de las riquezas adquiridas por el fraude.

  7. El propio autor en el prólogo afirma que va "a tejer en esta charla milesia fábulas de origen griego"; de esta forma queda establecida la relación de la novela de Apuleyo con esa tradición narrativa oriental, que ya hemos comentado a propósito del Satiricón y que tenía como características fundamentales su brevedad y su tono erótico, casi obsceno.