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  1. 10 de ene. de 2024 · El soberano dio origen así a un nuevo poder, el Sacro Imperio Romano (al que popularmente se añade el epíteto de “Germánico”), que se inspiraba en el modelo del que, no en vano, fue llamado “el padre de Europa”.

  2. Por esta razón, en el año 962 Otón fue proclamado emperador. De esta manera nació el Sacro Imperio Romano Germánico, cuya larga vida recién concluyo en 1806. Este imperio, que fue un nuevo intento por reconstruir el Imperio Romano de Occidente y que tuvo en Carlomagno un gran inspirador, se transformó en la principal potencia de Europa.

  3. El surgimiento del Sacro Imperio Romano Germánico (SIRG). Tras el Tratado de Verdún en el año 843, el Imperio Carolingio se fragmentó. El hijo de Carlomagno repartió sus territorios entres sus tres hijos y Europa Central se dividió en tres partes. La parte más oriental fue denominada Reino de Germania, otorgándose a Luis el Gérmánico.

  4. El Sacro Imperio Romano Germánico conformó el corazón de Europa durante mil años, desde su fundación con la coronación de Carlomagno el día de Navidad del año 800 en Roma, hasta su supresión en 1806 para evitar que un victorioso Napoleón lo usurpase. Una entidad vasta y en constante expansión, tan antigua como única, motor de ideas ...

  5. Este apoyo le valió ser coronado emperador en 962, resucitando por segunda vez el imperio romano de occidente (la primera fue con Carlomagno): nacía el Sacro Imperio Romano Germánico (más detalles sobre su funcionamiento aquí). Sin embargo, la alianza con el papa duró relativamente poco, ya que Juan XII cambió sus preferencias políticas.

  6. 3 minutos. La caída del Sacro Imperio Romano de Occidente, ocurrida en el año 476 d.C., marcó el fin de una era en la historia europea. Este acontecimiento significativo puso fin a siglos de dominio romano en Occidente y dio paso a la Edad Media. Descubre en Atalaya Cultural cómo esta transición transformó el panorama político, social y ...

  7. Aquí ya el Imperio romano de Occidente se descompuso definitivamente, quedando solamente el Imperio romano de Oriente, mejor conocido como el Imperio Bizantino, aunque ellos se consideraban romanos. Este imperio duraría prácticamente toda la Edad Media, hasta su caída en 1453 a mano de los turcos otomanos.