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Emperador alemán. Para el título "Emperador" en alemán, véase Káiser. El emperador alemán (en alemán: Deutscher Kaiser; [ˈdɔʏtʃɐ ˈkaɪzɐ]) era el título oficial del jefe de Estado y gobernante hereditario del Imperio alemán. Un término específicamente elegido, se introdujo con la constitución del 1 de enero de 1871 y duró ...
El imperio alemán. Entre 1871 y 1918 tuvo lugar en Alemania uno de los períodos históricos más importantes: la construcción del imperio alemán a partir de la unificación de Alemania alrededor del estado de Prusia y con la entronización de Guillermo I de Prusia como emperador en 1871. Este período termina con la proclamación de la ...
El Imperio Alemán fue un estado poderoso y significativo en la historia de Alemania y Europa. Durante su existencia, experimentó un rápido crecimiento económico y desempeñó un papel importante en la política y la cultura de la época. Sin embargo, también enfrentó desafíos políticos y sociales que finalmente llevaron a su caída ...
La Unificación de Alemania concluyó con la proclamación del Imperio alemán (Segundo Reich) el 18 de enero de 1871, con Prusia a la cabeza. Al iniciar el siglo XX, Alemania ya era una de las grandes potencias de Europa, rivalizando con la hegemonía de Reino Unido.
La unificación de Alemania fue un proceso histórico que tuvo lugar en la segunda mitad del siglo XIX en Europa Central y que culminó con la creación del Imperio alemán el 18 de enero de 1871 reuniendo diversos estados hasta entonces independientes, como Prusia, Baviera, o Sajonia. Proclamación del Imperio alemán (18 de enero de 1871 ...
El Imperio alemán (en alemán: Deutsches Reich o Deutsches Kaiserreich) fue la forma de Estado que existió en Alemania desde su unificación y la proclamación de Guillermo I como emperador, el 18 de enero de 1871, hasta 1918, cuando se convirtió en una república después de la derrota en la Primera Guerra Mundial y la abdicación de Guillermo II ( 9 de noviembre de 1918 ).
4 de ene. de 2015 · En la proclamación del emperador Guillermo I, el fundador del Imperio Alemán ocupa el centro, y el acto tiene lugar nada menos que en el Salón de los Espejos de Versalles.
