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  1. paginas.matem.unam.mx › sigueenza-y-gongora-carlosSigüenza y Góngora, Carlos

    Sigüenza y Góngora, Carlos; ... Necrológica y archivos de Sigüenza y G Diario de sucesos notables (1665-1703): ...

  2. 1 de may. de 2024 · Dentro de este gremio congregado por personajes ilustres resaltaba el nombre de don Carlos de Sigüenza y Góngora, quien tuvo una formación sacerdotal en el Colegio de los Jesuitas. Continuó sus estudios de filosofía y teología en la Real y Pontificia Universidad de México en donde tomó la cátedra de astronomía y matemáticas.

  3. Semblanza de Carlos de Sigüenza y Góngora. En el siglo XVII se desbordó, tanto en las artes plásticas como en las letras, una viva corriente de fantasía, adorno, de exterioridad llamativa, que fue el barroco. Sus manifestaciones se dejaron sentir básicamente en las naciones hispánicas.El arte barroco destacó como gesto de triunfo en ...

  4. 14 de ago. de 2019 · Carlos de Sigüenza y Góngora nació el 14 de agosto de 1645 en la Ciudad de México. Recibió los votos de los Jesuitas en 1662, donde estudió la carrera eclesiástica; en 1667 fue expulsado, se dice que a causa de indisciplina. En 1668 publicó “Primavera Indiana”, poema dedicado a la Virgen de Guadalupe. El tema religioso fue constante ...

  5. 5 de feb. de 1994 · Maza, Francisco de la."Sor Juana y Don Carlos. Explicación de dos sonetos hasta ahora confusos." Cuadernos Americanos 25 (1966):190-204. --. Sor Juana y Don Carlos. Explicación de dos sonetos hasta ahora confusos. México: Lito Ofset Fersa, 1970. Merkl, Heinrich. "Juana Inés de la Cruz y Carlos de Sigüenza y Góngora en 1680."

  6. Carlos de Sigüenza y Góngora inició una polémica sobre qué eran los cometas con la publicación del Manifiesto filosófico contra los cometas, con el cual quería tranquilizar a la gente por la reciente aparición de uno de ellos. A este Manifiesto contestaron varios personajes, el de mayor importancia fue el padre Eusebio Francisco Kino ...

  7. Metiéronme a mí y a los míos en la bodega, desde donde percibí grandes voces y un trabucazo; pasado un rato y habiéndome hecho salir afuera, vi mucha sangre, y mostrándomela, me dijeron ser de uno de los míos, a quien habían muerto y que lo mismo sería de mí si no respondía a propósito de lo que preguntaban.