Yahoo Search Búsqueda en la Web

Resultado de búsqueda

  1. 11 Poemas de John Keats. A LA SOLEDAD. ¡Oh, Soledad! Si contigo debo vivir, Que no sea en el desordenado sufrir. De turbias y sombrías moradas, Subamos juntos la escalera empinada; Observatorio de la naturaleza, Contemplando del valle su delicadeza, Sus floridas laderas, Su río cristalino corriendo; Permitid que vigile, soñoliento,

  2. John Keats. A quien en la ciudad estuvo largo tiempo... Bien venida alegría, bienvenido pesar... ¡Brillante estrella! Si fuera tan constante. ¡Feliz es Inglaterra! Ya me contentaría... Ten compasión, piedad, amor!...

  3. 26 de nov. de 2017 · John Keats, poesía Murió joven, pero escribió unos versos que le han sobrevivido durante siglos y que son emblema del movimiento romántico. A continuación puedes leer 5 poemas de John Keats.

    • (155)
  4. John Keats, uno de los poetas más destacados del Romanticismo inglés, exploró diversos temas en sus poemas. Algunos de los temas recurrentes en su obra fueron el amor, la belleza, la naturaleza, el arte y la mortalidad. El tema del amor es fundamental en la poesía de Keats.

  5. [Poema - Texto completo.] John Keats. ¡Oh! ¿Qué pena te acosa, caballero en armas, vagabundo pálido y solitario? Las flores del lago están marchitas; y los pájaros callan. ¡Oh! ¿Por qué sufres, caballero en armas, tan maliciento y dolorido? La ardilla ha llenado su granero y la mies ya fue guardada.

  6. Una rosa almizcleña recién mecida por el viento; la primera en desprender Su fragancia al verano: crecía encantadora, Como si fuera el cetro que empuñara la reina Titania. Y mientras me regalaba con su aroma, Pensé en la rosa de jardín, con mucho superada: Pero cuando, ¡Oh Wells!, tus rosas llegaron a mí,

  7. Al sueño. [Poema - Texto completo.] John Keats. Suave embalsamador de la rígida medianoche, que cierras con cuidadosos dedos. nuestros ojos que ansían ocultarse de la luz, envueltos en la penumbra de un olvido celestial; oh dulcísimo sueño, si así te place, cierra, en medio de tu canto, mis ojos anhelantes,