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I. De Diógenes compré un día. la linterna a un mercader; distan la suya y la mía. cuanto hay de ser a no ser. Blanca la mía parece; la suya parece negra; la de él todo lo entristece; la mía todo lo alegra. Y es que en el mundo traidor. nada hay verdad ni mentira; todo es según el color. del cristal con que se mira. II. –Con mi linterna – él decía–.
Letra de Las dos linternas. I. De Diógenes compré un día. la linterna a un mercader; distan la suya y la mía. cuanto hay de ser a no ser. Blanca la mía parece; la suya parece negra; la de él todo lo entristece;
Tesoro de la juventud LAS DOS LINTERNAS Del libro de la poesía Campoamor alude en esta poesía a lo que se refiere del filósofo griego Diógenes el Cínico (413-323 a. de J. C.), que recorrió una vez en pleno día las principales calles de Atenas con una linterna encendida y contestó a los que le preguntaron por el motivo de
Ramón de Campoamor - Las dos linternas. - I - De Diógenes compré un día. la linterna a un mercader; distan la suya y la mía. cuanto hay de ser a no ser. Blanca la mía parece; la suya parece negra; la de él todo lo entristece; la mía todo lo alegra. Y es que en el mundo traidor. nada hay verdad ni mentira: «todo es según el color.
De Diógenes compré un día. la linterna a un mercader; distan la suya y la mía. cuanto hay de ser a no ser. Blanca la mía parece; la suya parece negra; la de él todo lo entristece; la mía todo lo alegra. Y es que en el mundo traidor.
Las dos linternas/ 1846 / Ramón de Campoamor. I. De Diógenes compré un día. la linterna a un mercader; distan la suya y la mía. cuanto hay de ser a no ser. Blanca la mía parece; la suya parece negra; la de él todo lo entristece;
Ramón de Campoamor. Campoamor. Libro primero. Ternezas y flores. La niña y la mariposa. A Felisa. El día de su casamiento con D. Salustiano de Olozaga. La rueda del amor. Tu boca. La beata de máscara. Su imagen. A unos ojos. Libro segundo. Ayes del alma. A la Reina Cristina. Restauradora de las libertades patrias al partir para su destierro
