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  1. En el ojo profundo duermen palmeras exorbitantes. El grito se nos sale como una gota de oro virgen. y estrechos para nuestras filas. y las amamos porque empujaron nuestras canoas bajo los cielos rojos. nuestro sencillo canto. y el espíritu limpio. nuestro rasgo al perfil definitivo de América.

    • Sóngoro Cosongo

      Registro bibliográfico. Título: Sóngoro cosongo (1931) /...

    • Ficha

      Título: Sóngoro cosongo (1931) / Nicolás Guillén (en Formato...

  2. Los hombres antiguos nos darán leche y miel. y nos coronarán de hojas verdes. ¡Eh, compañeros, aquí estamos! Bajo el sol. nuestra piel sudorosa reflejará los rostros húmedos. de los vencidos, y en la noche, mientras los astros ardan en la punta. de nuestras llamas, nuestra risa madrugará sobre los ríos y los pájaros.

    • NICOLÁS GUILLÉN
    • E-mail: ivanfah @prodigy .net.mx
    • ELEGÍA CUBANA
    • como de un MAR en diástole,
    • donde bajo un gran cielo de hojalata
    • en el PECHO CLAVADO
    • FUEGO
    • las balas que a un PECHO puro, las balas que a un PECHO puro,
    • SEÑOR
    • En los sitios vacíos verán, miren ustedes hacia allá,
    • amigo.
    • el campo verde , la tierra libre y el cielo azul,
    • te sigo yo.
    • (Lo digo en mi son entero, porque es la pura verdad.)
    • usual en sus atracos de usurero ni al sobrino más fiel turbao engaña,
    • PLÁTANOS.
    • Ven al jardín. La plata de la LUNA envolverá tu frente nazarena
    • Ven a dejar en mi dolor sombrío el bálsamo ideal de tus amores; sin ti, mujer, se MORIRÁ de frío
    • Ven al jardín. La FUENTE rumorosa entonará su orquestación más bella
    • IV
    • EL MAL DEL SIGLO
    • ¿Por qué junto al camino de la Gloria siempre la Envidia pálida acecha el paso del romero cándido
    • ¡Cómo castiga el mundo al que nació con alas
    • Estos hombres de ahora sólo piensan en el ORO, que ENFANGA
    • FUEGO
    • ¡Oh Colombia prisionera, ORQUÍDEA puesta en un vaso, trino a trino , paso a paso
    • de la SANGRE que te baña.
    • te retuerces y suspiras,
    • No olvides a Siqueiros . Su pintura,
    • con LUZ DE ESTRELLA gritando en la altura,
    • LOS BARRIOS POBRES DEL ÁVILA
    • CALOR
    • Rojo calor para negros.
    • OJOS-LUZ
    • y que las dichas sean sobre tus ilusiones
    • OJOS DE CIEGO plomo
    • LUNA grande del trópico, que estás entre las cañas,
    • a la hora del vuelo taciturno
    • en un tibio RELÁMPAGO.
    • Pues bien : ello es que, niño y todo,
    • si la llaman... ¿Dónde su voz se esconde?
    • como si usted sintiera un amable furor porque le gritaron su nombre. Cosas
    • también es la montaña.
    • SANGRE anunciada, en venta una mañana de la Bolsa
    • ganó cuatro millones
    • trúmanes
    • Mirad al Capitán del Odio,
    • En una ráfaga de pólvora su rostro lívido se pierde;
    • el OJO FIJO ARDER le mira
    • Iv
    • ¡Qué dedos tiene, cuántas
    • de un RAYO DORMIDO DE LUNA
    • que trina la fina
    • TRES CANCIONES CHILENAS
    • sobre el salitre;
    • sobre la tierra desnuda
    • sus bárbaras calenturas, olfatea el aire espeso
    • de HIERRO y de esperanza
    • allá sola, tan lejos,
    • Un FULGOR DE MACHETEROS.
    • cayó como un PEDRUSCO negro,
    • de la gran revolución.
    • los negros OJOS LLENOS DE LUZ
    • LA VOZ ESPERANZADA
    • y en ojo, boca, carne de traidores hundiendo
    • a raíces volcánicas sujeta;
    • el candado que cierra las cosechas del mundo. Sales de ti; levantas la voz, y te levantas
    • la metralla,
    • para mezclar en una sola pasta HIRVIENTE LA ROCA
    • los amaneceres;
    • que nunca callará,
    • y la carne de los RÍOS.
    • de correr en la pista
    • LLEGADA
    • Traemos el humo en la mañana,
    • galeón ARDIENDO EN ORO...
    • Las TURBIAS AGUAS DEL RÍO son hondas y tienen MUERTOS;
    • sacude el arco del puente
    • En Norteamérica,
    • El Mississippi pasa
    • el Mississippi cuando pasa,
    • envuelto en humo el vientre desprendido,
    • no PIEDRA de tu lecho,
    • ¿No ha visto usted la calle? Ella es estrecha y ancha
    • ¿Tenéis todas mis señas?
    • de aquella tierra enorme, el apellido
    • los más DUROS,
    • II
    • Una canción alegre flota en la lejanía

    PRÓLOGO SALVADOR BUENO MENÉNDEZ ANÁLISIS ARQUETÍPICO

    MÉXICO INTRODUCCIÓN NICOLÁS GUILLEN CUBANO Y UNIVERSAL Los conquistadores españoles bautizaron aquel lugar con el nombre de Santa María del Puerto Príncipe. Después se le dio el nombre de Camagüey, de raigambre indígena. Allí nacería Nicolás Guillén el diez de abril de 1902. Toda su obra creado-ra está destinada a la confirmación de una auténtica p...

    Cuba, palmar vendido, SUEÑO DESCUARTIZADO, duro mapa de azúcary de olvido... ¿Dónde, fino venado, de bosque en bosque y bosque perseguido, bosque hallarás en que lamer la SANGRE de tu abierto costado? Al abismo colérico de tu incansable PECHO acantilado me asomo, y siento el lúgubre latir del agua insomne; siento cada latido

    como de un MAR en sístole, como de un MAR concéntrico, de un MAR como en sí mismo derramado. Lo saben ya, lo han VISTO las mulatas con hombros de caoba, las guitarras con vientre de mulata; lo repiten, lo han VISTO

    flota un velero MUERTO. Lo saben el tambor y el COCODRILO, los choferes, el Vista

    UN PUÑAL DE AGUARDIENTE. Cuba, tu caña miro gemir, crecer ansiosa, larga, larga, como un largo suspiro. Medio a medio del aire el humo AMARGO de tu INCENDIO aspiro; allí su cuerno erigen, deshaciéndose en mínimos RELÁMPAGOS pequeños diablos que convoca y cita la Ambición con su trompa innumerable. Allí su negra pólvora vistiendo el joven de cobarde...

    ELEGÍA A JESÚS MENÉNDEZ V Los grandes MUERTOS son inmortales: no MUEREN nunca. Parece que se marchan; parece que se los llevan, que se PUDREN, que se deshacen. Pensamos que la última tierra que les llena la boca va a enmudecerlos para siempre. Pero la len-gua se les hincha, les crece; la lengua se les abre como una semilla bárbara y expulsa un árbo...

    mi FLOR, por odio a CLAVARSE van. Pasó una PALOMA HERIDA, volando cerca mí; rojo le BRILLABA el cuello, que yo la vi. ¡Ay qué triste saber que el verdugo existe! Pero es más triste saber que mata para comer. Pues que tendrá la comida (todo puede suceder) un gusto a SANGRE caída, un gusto a SANGRE caída, caramba, y a lágrima de mujer. 11 Pasó una PA...

    Éntrate en mis abismos, Señor, y en ellos vierte la fe con que se triunfa del Mal y de la Muerte. QUEMA ESTA LLAGA HEDIONDA, verde ya de PODRIDA, que LACERA mi espíritu me roba la calma ENCIENDE entre las sombras rebeldes de mi alma el amor del que sufre y el perdón del que olvida. Señor: dame la gracia celestial de ser bueno. Hazme albura de armiñ...

    cómo nuestro equipo restaurador va colocando masas de algodón. Pero eso no puede bastar y dentro de cuatro siglos a lo sumo los navegantes tendrán que andar a tientas por el MAR. ¡Qué responsabilidad! El animal que más nos cuesta y el que menos se puede conservar. 21 CHÉ COMANDANTE No porque hayas caído tu LUZ es menos alta. Un CABALLO DE FUEGO sos...

    Estás en todas partes. En el indio hecho de sueño y cobre. Y en el negro revuelto en espumosa muchedumbre, en el ser petrolero y salitrero, en el terrible desamparo de la banana, y en la gran pampa de las pieles, en el azúcar y en la sal y en los cafetos, tú, móvil ESTATUA DE TU SANGRE como te derribaron, vivo, como no te querían, Che Comandante, a...

    una guirnalda de pólvora una bandera sonrisa un GALLO de cresta fija, curvas ESPUELAS DE LUZ! Muchacha de sierra y llano, muchacha recién crecida, dame la mano,

    MACHETE y FLOR. PALOMA y VIENTO. Te sigo yo. 26 MI PATRIA ES DULCE POR FUERA... Mi patria es dulce por fuera, muy AMARGA por dentro; mi patria es dulce por fuera, con su verde primavera, con su verde primavera, un SOL DE HIEL en el centro. ¡Qué cielo de AZUL callado, mira impasible tu duelo! ¡Qué cielo de AZUL callado, ay, Cuba, el que Dios te ha d...

    Hoy yanqui, ayer española, sí, señor, la tierra que nos tocó, siempre el pobre la encontró si hoy yanqui, ayer española, ¡cómo no! ¡Qué sola la tierra sola, la tierra que nos tocó! La mano que no se afloja hay que estrecharla en seguida; la mano que no se afloja china, negra, blanca o roja, china, negra, blanca o roja, con nuestra mano tendida. Un ...

    salvo si el tal sobrino es un madero. Y maderos tuvimos, es el caso, a cual más intrigante y bandolero, 33 y a quienes hubo que cortar el paso para abrirnos el nuestro hacia adelante como el pueblo acostumbra: de un trancazo. Dixi, buen Eliseo, ya es bastante. Perdona alguna rima mal situada y tenme por tu amigo el más constante. (Tú dirás: -Gracia...

    ¡Quencúyere, quencúyere, quencúyere! ¡Quencúyere, que la casera salga otra vez! SANGRE DE MAMEY sin venas, y yo que sin SANGRE estoy; mamey p'al que quiera SANGRE, que me voy. Trigueña de carne AMARGA, ven a ver mi carretón; carretón de palmas verdes, carretón; carretón de cuatro ruedas, carretón; carretón de SOL y tierra, ¡carretón! 37 CHÉVERE Ché...

    y en tu sedante cabellera bruna pondrá lirios ASTRALES la oportuna LUZ ESTELAR mirífica y serena.

    mi pobre corazón lleno de hastío, ¡igual que un ROTO búcaro sin flores! Ven a ahuyentar de mi existencia inquieta el pálido pesar que me ASESINA CLAVÁNDOME EL PECHO SU SAETA...

    y ante tu ASTRAL aparición de diosa, temblará en los rosalescada ROSA y en el raso nocturno cada ESTRELLA. Ven al jardín. Será bajo la clara limpidez espectral de los LUCEROS tu belleza de ARCÁNGEL aún más rara, y ante el jazmín sereno de tu cara de envidia morirán los jazmineros. Cabe el CRISTAL sonoro de la FUENTE tu mano de azucena entre las mía...

    Derramarán los ASTROS ENCENDIDOS como explosión triunfal sus LUMINARES, serán himnos de paz todos los nidos y habrá entre los NARANJOS florecidos un estremecimiento de azahares.

    Señor, Señor, ¿porqué odiarán los hombres al que lucha, al que sueña y al que canta? ¿Qué puedeun CISNE DULCE guardar sino ternuras en el alma? ¡Cuán doloroso es ver que cada ensayo, para volar, provoca una PEDRADA, un insulto mordaz , una calumnia!... ¿Por qué será la Humanidad tan mala?

    y le lanza su FLECHA ENVENENADA? Almas que se revuelcan en el LODO, ¿por qué serán las almas que siempre han de manchar la vestidura de aquel que lleva vestidura blanca?

    y sueña con la LUZ del Infinito desde las lobregueces de una jaula! Este siglo egoísta nunca ha sabido de quimeras cándidas, ni de ilusiones, ni de empeños nobles: este siglo se arrastra.

    42 todas las limpideces de la vida y todas las alburas de las almas. Señor, ya nadie sueña; Señor, ya nadie canta. Los caballeros de este siglo buscan la obscuridad de arteras emboscadas en sus noches sin gloria jamás viven su fina aristocracia, el eco de una lira, el amor de una dama el BRILLO, ante el asombro de la LUNA, del acero atrevido de una...

    ANGELA DAVIS Yo no he venido aquí a decirte que eres bella. Creo que sí, que eres bella, mas no se trata de eso. Se trata de que quieren que estés MUERTA. Necesitan tu cráneo para adornar la tienda del Gran Jefe, junto a las calaveras de Jackson y Lumumba. Ángela, y nosotros necesitamos tu sonrisa. Vamos a cambiarte los MUROS que alzó el odio, por ...

    te alcanza la primavera! Con GUADAÑA DE LUZ fiera la MUERTE EL PECHO te daña, mas aunque con su GUADAÑA TE DAÑA EL PECHO LA MUERTE, pura te alzas, madre fuerte,

    Canción de los hombres perdidos Palabras en el trópico

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  3. Entre los poetas míos… Nicolás Guillén ON el título genérico “Entre los poetas míos” ini-ciamos la publicación, en el mundo virtual, de una colección de cuadernos monográficos con los que deseamos contribuir a la divulgación de una poe-sía crítica que, denominada “poesía social”, “poesía com-

  4. View PDF. RESE NAS NICOLAs GUILLEN, S6ngoro Cosongo y otros poemas. Con una carta de Miguel de Unamuno.-La Habana, La Ver6nica, 1942. 118 pp. Sin duda alguna es Guillen, entre los poetas cubanos contempora- neos, el que de mis fama goza, y es que su entraia misma esencialmente popular lo lleva hacia los mis, y por lo mismo hacia lo trascendente.

    • Songoro Cosongo
  5. Nicolás Guillén Motivos de son 1. NEGRO BEMBÓN ¿Po qué te pone tan brabo, cuando te disen negro bembón, si tiene la boca santa, negro bembón? Bembón así como ere tiene de to; Caridá te mantiene, te lo da to. Te queja todabía, negro bembón; sin pega y con harina, negro bembón, majagua de dri blanco, negro bembón; sapato de do tono,

  6. Nicolás Guillén El son entero (1947) Guitarra A Francisco Guillén Tendida en la madrugada la firme guitarra espera: voz de profunda madera desesperada. Su clamorosa cintura, 5 en la que el pueblo suspira, preñada de son, estira la carne dura. Arde la guitarra sola, mientras la luna se acaba; 10