Yahoo Search Búsqueda en la Web

Resultado de búsqueda

  1. Padres de la Iglesia: PADRES LATINOS (en algunos casos hemos dejado el nombre en latín) San Ambrosio, Obispo de Milán (340-97) Arnobius, apologista (327) San Agustín, Obispo de Hippo (354-430)

  2. Los cuatro padres de la Iglesia Latina, Louis Cousin (ca. 1635) Los cuatro Padres de la Iglesia griegos son: Atanasio de Alejandría; Basilio el Grande; Gregorio Nacianceno; Juan Crisóstomo; Y los cuatro Padres de la Iglesia latinos son: Ambrosio de Milán; Jerónimo de Estridón; Agustín de Hipona; Gregorio Magno

  3. Los cuatro primeros (San Agustín, San Ambrosio, San Gregorio Magno y San Jerónimo) son los que nos encontramos en las iglesias del municipio de Elburgo. El número de cuatro se adoptó por analogía con los evangelistas, de acuerdo con las correspondencias tan queridas de la Edad Media.

    • 465KB
    • 6
  4. 22 de ene. de 2013 · 1. Los Padres de la Iglesia son grandes cristianos de los ocho primeros siglos después de Cristo distinguidos por sus enseñanzas coherentes con su vida que contribuyeron a edificar la Iglesia en sus estructuras primordiales. Fueron un numeroso y diverso grupo de verdaderos pastores que condujeron fielmente a los cristianos de los primeros ...

  5. En Agustín se desplegó este pensamiento de la manera más rica; él resalta particularmente que María es el miembro más excelente de la Iglesia. Si la teología de la Iglesia de los padres latinos estuvo influida desde oriente, en este contexto cabe remitir también a la interpretación de Jn 7, 37 38 junto con Jn 19, 34.

  6. Se llegó a ver que los verdaderos Padres de la Iglesia eran aquellos maestros católicos que habían perseverado en su comunión, y cuyas enseñanzas se han reconocido como ortodoxas. Así fue como sucedió que de los cuatro “ Doctores Latinos”, uno de ellos no es obispo.

  7. En los Padres hay algo de singular, irrepetible y perennemente válido, que continúa vivo y resiste a la fugacidad del tiempo. Los escritos que nos han legado ofrecen una riqueza cultural, espiritual y apostólica, que hace de los Padres los grandes maestros de la Iglesia de ayer, de hoy y de siempre. Ambrosio de Milán.