Resultado de búsqueda
La ramera de Babilonia es uno de los personajes que aparecen en el libro bíblico del Apocalipsis, concretamente en los capítulos 17 y 18. Se asocia con el Anticristo y la Bestia del Apocalipsis por su conexión con el reino de las siete cabezas y diez cuernos.
La ramera de Babilonia tendrá gran influencia en todo el mundo. Ella en algún momento va a ejercer dominio sobre el mundo, porque ella es "la gran ciudad que reina sobre los reyes de la tierra" (Apocalipsis 17:18).
La Gran ramera en el Apocalipsis es un símbolo poderoso que representa la seducción espiritual y la corrupción moral en el contexto de una alianza entre la religión falsa y el poder político. Su caída simboliza el juicio de Dios sobre el mal que ha corrompido a las naciones.
La Gran Ramera es mencionada en Apocalipsis 17:1-6 como una mujer vestida de púrpura y escarlata, adornada con oro, piedras preciosas y perlas. Tiene en su frente un nombre misterioso escrito: «Babilonia la grande, la madre de las rameras y de las abominaciones de la tierra».
Condenación de la gran ramera. 17 Vino entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que está sentada sobre muchas aguas; 2 con la cual han fornicado los reyes de la tierra, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino ...
La explicación de Cristo acerca de Babilonia la grande comienza en Apocalipsis 17:1: “Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que está sentada sobre muchas aguas”. Esta “gran ramera” está a punto de recibir sentencia por parte de Jesucristo debido a sus muchos pecados.
Como sistema religioso, Babilonia llegó a ser antes del Cristianismo, pero en una imitación Satánica anticipó la venida del verdadero Mesías. De acuerdo con la historia religiosa y la leyenda, la religión babilónica fue establecida por la esposa de Nimrod (un bisnieto de Noe), llamada Semiramis.