Resultado de búsqueda
18 Un hombre principal le preguntó, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? 19 Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno?
- Lucas 17
Ocasiones de caer -(Mt. 18.6-7,21-22; Mr. 9.42) -Dijo Jesús...
- Josué 6 Rvr1960
La toma de Jericó -Ahora, Jericó estaba cerrada, bien...
- Lucas 17
- Parábola de la viuda insistente. 18 Jesús les contó a sus discípulos una parábola para mostrarles que debían orar siempre, sin desanimarse. Les dijo: «Había en cierto pueblo un juez que no tenía temor de Dios ni consideración de nadie.
- Parábola del fariseo y del recaudador de impuestos. A algunos que, confiando en sí mismos, se creían justos y que despreciaban a los demás, Jesús les contó esta parábola: «Dos hombres subieron al templo a orar; uno era fariseo, y el otro, recaudador de impuestos.
- Jesús y los niños. También le llevaban niños pequeños a Jesús para que los tocara. Al ver esto, los discípulos reprendían a quienes los llevaban. Pero Jesús llamó a los niños y dijo: «Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque el reino de Dios es de quienes son como ellos.
- El dirigente rico. Cierto dirigente le preguntó: —Maestro bueno, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna? —¿Por qué me llamas bueno? — respondió Jesús—.
- También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar,
- diciendo: Había en una ciudad un juez, que ni temía a Dios, ni respetaba a hombre.
- Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él, diciendo: Hazme justicia de mi adversario.
- Y él no quiso por algún tiempo; pero después de esto dijo dentro de sí: Aunque ni temo a Dios, ni tengo respeto a hombre,
1 Jesús contó a sus discípulos una parábola para mostrarles que debían orar siempre, sin desanimarse. 2 Les dijo: «Había en cierto pueblo un juez que no tenía temor de Dios ni consideración de nadie. 3 En el mismo pueblo había una viuda que insistía en pedirle: “Hágame usted justicia contra mi adversario”. 4 Durante algún tiempo él se negó, pero...
Parábola de la viuda y el juez injusto. 1 Y les refería Jesús una parábola para enseñarles que ellos debían orar en todo tiempo, y no desfallecer, 2 diciendo: Había en cierta ciudad un juez que ni temía a Dios ni respetaba a hombre alguno. 3 Y había en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él constantemente, diciendo: «Hazme ...
1 Jesús les mostró con un ejemplo que debían orar siempre, sin desanimarse jamás: 2 En una ciudad había un juez que no temía a Dios ni le importaba la gente. 3 En la misma ciudad había también una viuda que acudía a él para decirle: 'Hazme justicia contra mi adversario'. 4 Durante bastante tiempo el juez no le hizo caso, pero al final ...
1 También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar, 2 diciendo: Había en una ciudad un juez, que ni temía a Dios, ni respetaba a hombre. 3 Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él, diciendo: Hazme justicia de mi adversario. 4 Y él no quiso por algún tiempo; pero después ...