Yahoo Search Búsqueda en la Web

Resultado de búsqueda

  1. Sus cuarenta y cinco años de vida coincidieron con los momentos más álgidos de la historia decimonónica de México: vivió la guerra contra los Estados Unidos, la revolución de Ayutla, la Guerra de Reforma, la Intervención Francesa y el Segundo Imperio.

  2. Entre los años de la Revolución de Ayutla (1854) y la Guerra de Reforma (1858), continuó siendo perseguida, y no solo ella; sino todas aquellas mujeres que apoyaban a los liberales. Incluso cuando Juárez asciende a la presidencia (1860), Margarita tuvo que atravesar la sierra oaxaqueña con sus ocho hijos para reunirse con Juárez en ...

  3. 7 de mar. de 2024 · Redacción. NVI Noticias - 07/03/2024 - 13:03. - 1 - A pocas horas de conmemorarse el Día Internacional de la Mujer, recordamos a una mujer oaxaqueña que trascendió las fronteras de la patria chica...

  4. Primera Dama de México. Esposa de Benito Juárez. Partido político: Liberal. Padres: Antonio Maza y Petra Parada. Cónyuge: Benito Juárez (m. 1843-1871) Hijos: Manuela, Margarita, María Felícitas Teodora, Guadalupe, Soledad, Amada, Benito Luis Narciso, María de Jesús, Josefa, José María, Jerónima Francisca, Antonio.

  5. En la ciudad de México, murió en 1862 su hija Jerónima Francisca que había nacido tres años antes en Veracruz durante la Guerra de Reforma. [cita requerida] En 1864, al tiempo que Margarita y sus hijos se encontraban en Nueva York, muere su hijo José María a los ocho años de edad.

  6. 7 E. M. De los Ríos, “Margarita Maza”, en Daniel Cabrera (ed.), Liberales Ilustres Mexicanos de la Reforma e Intervención, México, Imprenta del Hijo del Ahuizote, 1890, p. 67. 8 Ana Carolina Ibarra, El Cabildo Catedral de Antequera, Oaxaca, y el movimiento insur-gente, Zamora, El Colegio de Michoacán, 2000, p. 98.

  7. 00:00. 00:00. De la época de la Reforma, una de las pocas mujeres que ha trascendido y merecido el reconocimiento nacional es Margarita Maza, la esposa de Benito Juárez. A ella no le tocaron todavía beneficios de la reforma liberal, sino sufrir en carne propia la resistencia al cambio. Patricia Galeana.