Yahoo Search Búsqueda en la Web

Resultado de búsqueda

  1. ¿Qué validos tuvo Felipe III? Felipe III fue el tercer rey de la dinastía de los Austrias, quien gobernó España desde 1598 hasta 1621. Como muchos otros monarcas de su tiempo, confió en validos para ayudarlo a gobernar. El primer válido de Felipe III fue su secretario de Estado, Francisco de Rojas.

  2. Los validos de Felipe III fueron una figura clave en la monarquía española durante el reinado de Felipe III, que ocupó el trono entre 1598 y 1621. Esta figura existió desde el reinado de Fernando el Católico hasta el de Carlos III, pero su máximo esplendor se vivió durante el reinado de Felipe III. Los validos eran consejeros reales de ...

  3. 28 de sept. de 2023 · Validos de Felipe III (1598-1621): el duque de Lerma y el duque de Uceda. Validos de Felipe IV (1621-1665): el conde-duque de Olivares y Luis de Haro. Validos de Carlos II (1665-1700): el padre Juan Everardo Nithard y Fernando de Valenzuela (durante la regencia de Mariana de Austria, entre 1665 y 1675), el duque de Medinaceli y el conde de Oropesa.

  4. Felipe III, conocido también como el Rey Piadoso, reinó entre los años 1598 hasta su muerte en 1621. Durante su gobierno, se produjeron importantes cambios en la política y la economía del país, los cuales estuvieron influenciados por los distintos validos que Felipe tuvo a lo largo de su reinado.

  5. Felipe IV de España (1621-1665) Baltasar de Zúñiga (1621-1622) Gaspar de Guzmán y Pimentel, el Conde-Duque de Olivares (1622-1643) Luis de Haro (1643-1661) Los validos de Felipe III y Felipe IV pertenecían a dos familias rivales: los Sandoval y los Zúñiga, y las conspiraciones para deponerlos actuaban también dentro de las mismas familias.

  6. Felipe III ha sido juzgado mucho más severamente de lo que lo han sido su hijo, Felipe IV, y el valido de este, Olivares, más favorablemente que Lerma, algo que resulta sorprendente si se comparan los resultados de sus respectivos gobiernos.

  7. Sin embargo, la llegada al trono de su hijo Felipe III cambió radicalmente el tratamiento de los asuntos de Estado. La figura del valido eclipsó a los secretarios, a quienes arrebató competencias, y pasó a controlar los resortes del poder.