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Real Academia Española © Todos los derechos reservados. 1. tr. amenazar (‖ dar a entender que se quiere hacer algún mal). 2. tr. Apremiar con potestad a alguien para que obedezca. 3. tr. Der. Dicho de la autoridad: Requerir a alguien el cumplimiento de un mandato, bajo pena o sanción determinadas.
1. v. tr. culto Proferir amenazas de hacer daño a una persona o de darle un castigo si no hace lo que se le ordena la conminó con una expresión cargada de maldad. amenazar. 2. DERECHO Requerir la autoridad un mandato, dando a conocer la sanción o pena a la que está expuesto en caso de incumplimiento.
1. v. tr. culto Proferir amenazas de hacer daño a una persona o de darle un castigo si no hace lo que se le ordena la conminó con una expresión cargada de maldad. amenazar. 2. DERECHO Requerir la autoridad un mandato, dando a conocer la sanción o pena a la que está expuesto en caso de incumplimiento.
Escuchar: sinónimos | definición RAE | Gramática | en inglés | en francés | conjugar | en contexto | imágenes. Diccionario de la lengua española © 2005 Espasa-Calpe: conminar conjugar ⇒. tr. Amenazar, intimidar. der. Exigir una autoridad el cumplimiento de una obligación bajo amenaza de castigo.
conminar. v tr (Se conjuga como amar) Invitar de manera perentoria una persona a otra a que haga algo o actúe de cierta forma: “Con el bastón apuntó agresivamente al juez y lo conminó a retirar los cargos”, “Los conminó a que se dedicaran a jugar”, “Además, y muy a tono con la época, proliferaron las inscripciones latinas ...
24 de oct. de 2023 · Intimar o exigir una autoridad para que se cumpla un mandato o pena, y que lleva implícita una amenaza de no obedecer. Se refiere a obligar a alguien a hacer algo mediante una orden o requerimiento. Ejemplos de uso: "a través de una carta oficial le conminaron a pagar sus multas de tránsito".
1. Amenazar. 2. 2. Amenazar, aquel que tiene potestad, a quien está obligado a obedecer, con penas o castigos temporales o espirituales. 3. Ejemplo: En 1899, el concilio plenario de América Latina, celebrado en Roma, conminó a los sacerdotes a tratar de «herejes y fautores y defensores de herejes» a quienes practicaran el espiritismo.
