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11 de may. de 2021 · La clasificación más común del dolo distingue entre dolo directo y dolo eventual. Para poder explicar la diferencia entre ambos, nos vamos a fijar en el elemento intelectual: en el primero, el autor ve el resultado como cierto (sé perfectamente que disparar a alguien en el corazón tiene como resultado su muerte).
El dolo directo y el dolo eventual son dos formas distintas de manifestación de la intención delictiva en el ámbito jurídico. Mientras que el dolo directo implica una intención clara y directa de cometer un delito, el dolo eventual implica la aceptación de un resultado delictivo como una eventualidad aceptada.
consideramos suficiente hablar de: a) dolo directo de primer grado (o intención en sentido estricto), b) dolo directo de segundo grado, c) dolo eventual, mismas que a continuación trataremos de analizar.
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9 de oct. de 2023 · Dolo eventual. En el dolo eventual, el autor de un hecho no tiene intención de provocar un resultado, pero lo acepta y sigue adelante. El resultado se puede dar o no. Cogiendo los ejemplos anteriores, el individuo quiere estrellar su coche contra el de la víctima para causar unas lesiones.
Se actualiza cuando el sujeto activo lo comete conociendo los elementos del tipo penal o previendo como posible el resultado típico y, aun así, quiere o acepta la realización del hecho descrito por la ley como delito. El dolo, a su vez, tiene dos modalidades: Dolo Directo y Dolo Eventual.
Esto significa que cualquier forma de dolo, ya sea directo o eventual, es tratada de manera similar y se puede castigar de la misma manera. Obra dolosamente el que, conociendo los elementos del tipo penal, o previendo como posible el resultado típico, quiere o acepta la realización del hecho descrito por la ley, y
En la terminología doctrinaria se distingue el dolo directo del dolo eventual. En el dolo directo el sujeto actúa para provocar el daño, y son atribuibles a esa forma de dolo todos los daños que aparezcan necesariamente en su previsión al realizarlo; el dolo directo absorbe.
