Resultado de búsqueda
3 de may. de 2024 · La mayoría de las personas cuando hablamos de monarquía en México, piensan en Maximiliano y su esposa Carlota, quienes juraron como Emperadores del territorio mexicano un 10 de abril de 1864; este estado monárquico duraría hasta 1867. Sin embargo, lo que pocos saben es que tiempo atrás existió otra emperatriz que casi nadie recuerda o conoce.
16 de abr. de 2024 · Ella fue Marie Charlotte Amélie Augustine Victoire Clémentine Léopoldine de Saxe-Coburg-Gotha (Bruselas, 7 de junio de 1840-Meise, 19 de enero de 1927), más conocida como Carlota de México, la primera mujer que gobernó en México. Ella es la protagonista de “Carlota Emperatriz.
30 de abr. de 2024 · Carlota, princesa de Bélgica, pasó a la historia como la primera emperatriz de mexicana y su estadía en tierra azteca es hasta hoy del interés de especialistas en el Segundo Imperio Mexicano. A pesar de esto, ella no fue la última pieza de la monarquía en nuestro país .
16 de abr. de 2024 · 15:54 hrs. - Desde hoy el cetro que perteneció a la emperatriz Carlota se exhibe en el museo del Castillo de Miramar en Trieste, Italia. Adquirido en Montecarlo el verano pasado en el marco de una subasta en el Principado de Mónaco por la Fundación CRTrieste, el objeto es protagonista de una exposición instalada en el primer piso de la ...
22 de abr. de 2024 · «Pocos personajes de la historia mexicana, rica de por sí en protagonistas sorprendentes, dramáticos y hasta grotescos, han incitado a tal grado la imaginación colectiva como la mujer que fue por un momento fugaz la emperatriz de México», afirma Igler.
28 de abr. de 2024 · Una sorpresa final: México tuvo una gobernante efímera, pero no ocupaba el lugar principal. Se trata de la emperatriz Carlota, esposa de Maximiliano. Estaba facultada legalmente a ejercer el mando en ausencia de su marido, y como el emperador era muy afecto a los viajes, Carlota tomó muchas decisiones públicas.
19 de abr. de 2024 · Mujer de carácter fuerte e inquieto era una experta en la diplomacia de salón, lo que le valió para, manejar a su antojo el destino de su marido hasta convertirlo, a base de susurros y puñaladas por la espalda, en el Rey de México en una de las épocas más convulsas de la historia del país.
