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57 Ten misericordia de mí, oh Dios, ten misericordia de mí; Porque en ti ha confiado mi alma, Y en la sombra de tus alas me ampararé. Hasta que pasen los quebrantos. 2 Clamaré al Dios Altísimo, Al Dios que me favorece. 3 Él enviará desde los cielos, y me salvará. De la infamia del que me acosa; Selah. Dios enviará su misericordia y su ...
- Salmos 57 NTV - Para el director del coro: salmo de - Bible ...
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Salmos 57 | RVR1960 Biblia | YouVersion. Plegaria pidiendo ser librado de los perseguidores. (Sal. 108.1-5) Al músico principal; sobre No destruyas. Mictam de David, cuando huyó de delante de Saúl a la cueva. 1 Ten misericordia de mí, oh Dios, ten misericordia de mí; Porque en ti ha confiado mi alma, Y en la sombra de tus alas me ampararé.
- Ten misericordia de mí, oh Dios, ten misericordia de mí; Porque en ti ha confiado mi alma, Y en la sombra de tus alas me ampararé Hasta que pasen los quebrantos.
- Clamaré al Dios Altísimo, Al Dios que me favorece.
- Él enviará desde los cielos, y me salvará De la infamia del que me acosa; Selah Dios enviará su misericordia y su verdad. Selah.
- Mi vida está entre leones; Estoy echado entre hijos de hombres que vomitan llamas; Sus dientes son lanzas y saetas, Y su lengua espada aguda.
1 ¡Ten misericordia de mí, oh Dios, ten misericordia! En ti busco protección. Me esconderé bajo la sombra de tus alas. hasta que haya pasado el peligro. 2 Clamo al Dios Altísimo, a Dios, quien cumplirá su propósito para mí. 3 Él mandará ayuda del cielo para rescatarme, y avergonzará a los que me persiguen. Interludio.
1 ¡Ten misericordia de mí, Dios mío; ten misericordia de mí! Yo he puesto en ti mi confianza, y bajo la sombra de tus alas me refugiaré. hasta que haya pasado el peligro. 2 Clamo a ti, Dios altísimo, pues tú me favoreces; 3 desde los cielos vendrás en mi ayuda, enviarás tu misericordia y tu verdad, y me librarás de mis infames opresores.
1 Piedad de mí, oh Dios, piedad de mí, pues en ti se refugia el alma mía; a la sombra de tus alas me cobijo hasta que haya pasado la tormenta. 2 Yo clamo al Dios Altísimo, al Dios que de mí cuida. 3 Que del cielo mande alguien a salvarme de las manos de aquellos que me acosan; envíe Dios su gracia y su verdad.