Yahoo Search Búsqueda en la Web

Resultado de búsqueda

  1. Pero un solo bocado significaba la muerte segura. Cuando tuvo preparada la manzana, se pintó nuevamente la cara, se vistió de campesina y se encaminó a las siete montañas, a la casa de los siete enanos. Llamó a la puerta, Blancanieves asomó la cabeza a la ventana y dijo: —No debo abrir a nadie; los siete enanitos me lo han prohibido.

  2. Poco después, a la noche, los siete enanos regre-saron a la casa y se asustaron mucho al ver a Blanca-nieves en el suelo, inmóvil. La levantaron y descubrieron el lazo que la oprimía. Lo cortaron y Blancanieves comenzó a respirar y a reanimarse po-co a poco. Cuando los enanos supieron lo que había pasado www.grimmstories.com 2

  3. Disfrazada de vieja, la malvada reina preparó una manzana con veneno, cruzó las siete montañas y llegó a casa de los enanitos. Blancanieves, que sentía una gran soledad durante el día, pensó que aquella viejita no podía ser peligrosa. La invitó a entrar y aceptó agradecida la manzana, al parecer deliciosa, que la bruja le ofreció.

  4. Blancanieves y los siete enanos 3 reina preparó una manzana con veneno, cruzó las siete montañas y llegó a casa de los enanitos. Blancanieves, que sentía una gran soledad durante el día, pensó que aquella viejita no podía ser peligrosa. La invitó a entrar y aceptó agradecida la manzana, al parecer deliciosa, que la bruja le ofreció.

  5. Descargar gratis el libro «Blancanieves y los Siete Enanitos» de Hermanos Grimm en PDF. Este ebook gratuito del libro de Hermanos Grimm «Blancanieves y los Siete Enanitos» en formato PDF se puede leer desde cualquier dispositivo: ordenadores, tablets y smartphones.

    • Hermanos Grimm
  6. Cuento clásico de los hermanos Grimm. © Versión escrita por Paola Artmann. Audio de texto a voz para una lectura asistida. Érase una vez una joven y bella princesa llamada Blancanieves que vivía en un reino muy lejano con su padre y madrastra. Su madrastra, la reina, era también muy hermosa, pero arrogante y orgullosa.

  7. Poco después, a la noche, los siete enanos regresaron a la casa y se asustaron mucho al ver a Blancanieves en el suelo, inmóvil. La levantaron y descubrieron el lazo que la oprimía. Lo cortaron y Blancanieves comenzó a respirar y a reanimarse poco a poco. Cuando los enanos supieron lo que había pasado dijeron: