Resultado de búsqueda
porque el SEÑOR vuestro Dios es el que va con vosotros, para pelear por vosotros contra vuestros enemigos, para salvaros." Pues tú me has ceñido con fuerza para la batalla; has subyugado debajo de mí a los que contra mí se levantaron. Claman {los justos,} y el SEÑOR {los} oye, y los libra de todas sus angustias.
2 Crónicas 32:8. LBLA. Con él está solo un brazo de carne, pero con nosotros está el Señor nuestro Dios para ayudarnos y pelear nuestras batallas. Y el pueblo confió en las palabras de Ezequías, rey de Judá. JBS.
31 de jul. de 2012 · Entender que Dios pelea nuestras batallas. 2 Crónicas 32:8 (NVI) “Él se apoya en la fuerza humana, mientras que nosotros contamos con el SEÑOR nuestro Dios, quien nos brinda su ayuda y pelea nuestras batallas.” 1. Él se apoya en la fuerza humana – Predicaciones cristianas cortas de animo
Hoy hablaremos sobre el estudio bíblico “Dios pelea nuestras batallas”. Según la Biblia, Dios es nuestro guerrero y nos protege de todo mal. En este artículo aprenderás cómo confiar en Él para enfrentar las adversidades y superar las batallas de la vida. ¡Empecemos!
Este versículo nos llama a permanecer firmes en nuestra fe, Sabemos que Dios está a nuestro lado, listo para pelear nuestras batallas y guiarnos a través de los desafíos de la vida. Finalmente, Éxodo 14:14 da esperanza a quienes luchan contra la adversidad y el mal.
Dios pelea mis batallas, 2 Crónicas 20:17-20, Jehová peleará por nosotros, Dios pelea por ti, Dios no ha perdido ninguna batalla. Cuando te detienes y lo piensas, estamos en medio de varias batallas. Batallas con el clima, nuestra salud o la de nuestra familia, nuestras situaciones financieras, las relaciones con nuestras familias y vecinos ...
12 de jul. de 2023 · Pero luego velamos por nuestra liberación con la fe atada al Dios que cumple Sus promesas. Él promete estar con nosotras cuando enfrentemos nuestras batallas, sean las que sean (2 Crónicas 20:20). Hoy el sol se quedará, y me apoderaré de lo que aún no puedo ver. Por fe, me levanto y enfrento la confusión, creyendo que la ...
