Yahoo Search Búsqueda en la Web

Resultado de búsqueda

  1. Lucas 9:37-43. Reina Valera Contemporánea. Jesús sana a un muchacho endemoniado. 37 Al día siguiente, cuando bajaron del monte, una gran multitud les salió al encuentro, 38 y con fuerte voz un hombre de la multitud le dijo: «Maestro, te ruego que veas a mi hijo.

  2. ¿Qué quieres de nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé quién eres tú: ¡el Santo de Dios! 35 Pero Jesús reprendió al espíritu maligno y le dijo: —¡Cállate y sal de él! Entonces delante de todos, el demonio tiró al hombre al suelo y después salió de él sin hacerle ningún daño.

  3. Mateo 4:10. Versículos Conceptos. Entonces Jesús le dijo*: ¿Vete, Satanás! Porque escrito está: ``AL SEÑOR TU DIOS ADORARAS, Y SOLO A EL SERVIRAS." Lucas 11:14. Versículos Conceptos. Estaba {Jesús} echando fuera un demonio, que era mudo, y sucedió que cuando el demonio salió, el mudo habló; y las multitudes se maravillaron. Mateo 8:16.

  4. Nueva Traducción Viviente. Jesús sana a un hombre endemoniado. 5 Entonces llegaron al otro lado del lago, a la región de los gerasenos.[ a] 2 Cuando Jesús bajó de la barca, un hombre poseído por un espíritu maligno[ b] salió de entre las tumbas a su encuentro. 3 Este hombre vivía en las cuevas de entierro y ya nadie podía sujetarlo ...

  5. Cuando el endemoniado se acercó al principio a Jesús, le suplicó que le dejara. Cristo no atendió esta petición porque el hombre no actuaba con libertad, sino bajo la poderosa influencia de los demonios. Más tarde los gadarenos le rogaron que se fuera de sus contornos.

  6. 9 de jun. de 2018 · 9 junio, 2018. COMPARTIR. ¿Por qué Jesús fue considerado loco o endemoniado? Este es un tema que abordaremos en nuestro artículo del día de hoy. También reflexionaremos sobre la manera de pensar del Señor sobre la parentela. Mons. Salvador Martínez.

  7. 21 de mar. de 2015 · Los endemoniado gadarenos. La obra maligna de Satanás. “Cuando llegó a la otra orilla, a la tierra de los gadarenos, vinieron a su encuentro dos endemoniados que salían de los sepulcros, feroces en gran manera, tanto que nadie podía pasar por aquel camino”. Mateo 8:28.