Resultado de búsqueda
Rubén Darío, poeta nicaragüense, fue uno de los más destacados representantes del modernismo, un movimiento literario hispanoamericano que sentó un precedente en la historia de la lengua española. Presentamos una selección de 12 poemas, agrupados de la siguiente forma: siete poemas cortos y cinco extensos, incluido un poema de Rubén ...
31 Poemas de Rubén Darío. ¡OH MI ADORADA NIÑA! ¡Oh mi adorada niña! Te diré la verdad: tus ojos me parecen. brasas tras un cristal; tus rizos, negro luto, y tu boca sin par, la ensangrentada huella. del filo de un puñal. Autor del poema: Rubén Darío. 87.99% votos positivos. Votos totales: 3887. Comparte: ABROJOS - LVI. Tengo de criar un perro,
64 poemas de Rubén Darío: análisis y selección de los principales. Poemas de Rubén Darío. ¡Oh mi adorada niña!. A Colón (analizado). A Juan Ramón Jiménez (analizado). A los poetas risueños. Á maestre Gonzalo de Berceo. A Margarita Debayle (analizado). A Phocás, el Campesino (analizado). A Roosevelt (analizado).
10 de abr. de 2019 · La poesía de Rubén Darío engloba a la perfección todas las características del modernismo. Desde la estructura forma (cromatismo, sonoridad, ritmo), hasta los temas (exótico, mitológico, mundo interior). Rubén Darío busca la belleza a través de la palabra.
Poemas de Rubén Darío. Ordenar A-Z Popularidad. A Colón. A Juan Ramón Jiménez. A Maestre Gonzalo de Berceo. A Margarita Debayle. A Phocás, el campesino. A Roosevelt. Al Rey Óscar. Alaba los ojos negros de Julia. Año nuevo. Autumnal. Blasón. Bouquet. Campoamor. Canción de carnaval. Canción de otoño en primavera. Caracol. Caso. Catulle Mendés.
Rubén Darío: 12 poemas cortos del genio del modernismo - Tu Resumen. DESCARGAR PDF IMPRIMIR. Rubén Darío, uno de los más grandes exponentes del modernismo en la literatura hispanoamericana, es reconocido por su inigualable talento y sus contribuciones al mundo de la poesía.
Venus - Poemas de Rubén Darío. Rubén Darío. Inicio > Rubén Darío > Venus. +. - En la tranquila noche, mis nostalgias amargas sufría. En busca de quietud bajé al fresco y callado jardín. En el obscuro cielo Venus bella temblando lucía, como incrustado en ébano un dorado y divino jazmín. A mi alma enamorada, una reina oriental parecía,
